Medidas ambientales y de adaptación al cambio climático en Sax

Ahora que se acercan las elecciones municipales y que los distintos partidos políticos están elaborando sus programas electorales, es buen momento para compartir una serie de medidas que, a mi juicio, serían fundamentales para mejorar el estado del medio ambiente en Sax y, por ende, la calidad de vida, la salud y el bienestar de sus vecinos. Estas medidas son también clave para que nuestro municipio pueda adaptarse al cambio climático que ya tenemos aquí. El tórrido verano que hemos sufrido en 2022 y la falta de lluvias y temperaturas tan elevadas que estamos viviendo esta primavera no son más que un tráiler de la película del clima del futuro, que desgraciadamente ya tenemos aquí. Resulta pues fundamental que comencemos a adaptarnos a unas condiciones climáticas que se van a caracterizar por primaveras y veranos más calurosas/os de lo que estamos acostumbrados y a un clima cada vez más seco y árido.

No pretendo aquí dar una lista exhaustiva de medidas ni desgranar detalles técnicos de cada una de ellas y me centro en medidas realistas que pueden implementarse en una legislatura. Mi única motivación es contribuir a que aspectos fundamentales para nuestro presente y futuro puedan ser considerados en los programas electorales de los partidos que concurren a las próximas elecciones. El medio ambiente, la salud y la calidad de vida de los sajeños y sajeñas no entiende de ideologías ni partidos políticos, son cuestiones fundamentales y transversales que nos afectan a todos/as y que por ende deben de ser una prioridad para todas las agrupaciones políticas que concurren a estas elecciones.

Las distintas medidas, las he agrupado en torno a cinco grandes ejes, que son los siguientes:

1) Incremento de zonas verdes y renaturalización del casco urbano. 

En este eje se encuadran proyectos muy importantes que ya se han presentado/elaborado (o están en vías de elaboración) y que se tendrán que ejecutar por la siguiente corporación municipal. Estos incluyen el: 1) plan de renaturalización del cauce del Vinalopó, 2) la recuperación y ajardinamiento de El Molino y su entorno y 3) el plan de reforestación urbana de Sax, cuyo objetivo es incrementar la superficie arbolada dentro del casco urbano para dotarlo de más sombra y mejorar la salud y bienestar de los vecinos. 

Junto a estos tres proyectos clave que se deben ejecutar, sería importante desarrollar un cuarto: un plan de reforestación de los caminos de propiedad municipal. La idea de este plan sería el plantar árboles y arbustos en el borde de estos caminos para dotarlos de sombra y que puedan así ser más utilizados en el futuro por viandantes y ciclistas y que puedan a su vez actuar de corredores ecológicos y promover un incremento de la biodiversidad. Se pueden utilizar especies arbóreas como el algarrobo, especie presente en nuestro término municipal que soporta muy bien la sequedad de nuestro clima y proporciona una buena sombra una vez desarrollado, así como arbustos y especies herbáceas adaptadas a nuestras condiciones climáticas (como el esparto, el romero, el tomillo y la albaida).

Si queremos que dentro de 30 años Sax siga siendo tan habitable como hasta ahora, sobre todo en verano, necesitamos que más árboles y arbustos ocupen sus calles y plazas. Los árboles, y la vegetación/zonas verdes en general, refrescan el ambiente al liberar por sus hojas vapor de agua, mejoran nuestro estado de ánimo y salud y capturan el CO2 del aire para liberar oxígeno a la atmósfera, siendo pues uno de los mejores aliados que tenemos para luchar contra la emergencia climática que estamos viviendo. 

 


2) Peatonalización de calles, reducción de tráfico rodado y movilidad sostenible

Sax soporta un tráfico rodado excesivo para el tamaño de su población y casco urbano, ya que buena parte de los desplazamientos que se realizan en vehículo privado pueden realizarse andando o en bicicleta. Para reducir el tráfico rodado y mejorar así la salud (se estima que la contaminación causada por los vehículos es responsable de unas 18000 muertes evitables en España), la seguridad y el bienestar de los vecinos, sería muy importante comenzar con la peatonalización de la Gran Vía y la Calle Mayor. Para ello habría que eliminar el aparcamiento existente a lo largo de la Gran Vía, espacio que se ganaría para las personas ensanchando las aceras, plantando más árboles para que haya más sombra e introduciendo bancos para un mayor aprovechamiento y disfrute del espacio público. También se deberían completamente tramos de la Gran Vía (como entre la Plaza de San Sebastián y la Plaza Cervantes), así como la Calle Mayor entre el Ayuntamiento y la Fuente del Cura. Estos cambios deben de ir acompañada del establecimiento de bolsas de aparcamiento a las afueras del casco urbano y de una reducción de la anchura de la calzada destinada a los coches para reducir su velocidad.

Esta medida es impopular a ojos de muchos/as vecinos/as pero es una de las medidas más beneficiosas que se pueden tomar para todos. La peatonalización de calles y la disminución del tráfico rodado ha traído consigo una mayor calidad de vida, mejoras notables en indicadores de salud y un incremento de la actividad comercial allá donde se ha implantado, y Sax no sería una excepción. Y quien no lo crea que mire el ejemplo de las peatonalizaciones en ciudades como Pontevedra, Barcelona o Madrid.  

Junto a estas medidas, que sin duda favorecerían el que los/as vecinos/as de Sax se desplacen caminando, habría también que fomentar el uso de la bicicleta como medio de transporte. Para ello sería clave el realizar carriles bici que conecten el centro urbano con los polígonos industriales de la localidad para que los/as trabajadores/as que así lo deseen puedan desplazarse en bicicleta con seguridad y tranquilidad. Asimismo, y en colaboración con las principales empresas de Sax, podrían ponerse en marcha campañas para fomentar el uso de coches compartidos y evaluar la posibilidad de utilizar autobuses en lugar de coches particulares para desplazarse a las principales zonas industriales. 

3) Medidas de protección y fomento de la biodiversidad

Junto a las medidas de renaturalización presentadas en el apartado 1, que tienen un impacto muy positivo en la biodiversidad local, se pueden hacer muchas pequeñas medidas que también lo tienen. Algunos ejemplos son: renaturalizar los alcorques de los árboles con vegetación espontánea, no desbrozar los descampados ni bordes de los caminos en zonas urbanas (y preferiblemente también en zonas rurales) para permitir el desarrollo de la vegetación espontánea y el mantenimiento de toda la biodiversidad asociada, colocar cajas nido para favorecer la población de murciélagos y de hoteles para insectos para hacer lo propio con las poblaciones de insectos y utilizar vegetación autóctona e incrementar la diversidad de plantas con flor (autóctonas) cuando se realicen tareas de ajardinamiento.


4) Medidas para la disminución de la producción de residuos y fomentar el reciclaje.

Sax tiene un serio problema con los residuos, tanto por su producción (no hay más que ver los contenedores para ser consciente de la magnitud de este problema) como por su abandono (lamentablemente nuestras calles y parajes naturales están llenas de residuos y envases abandonados). Amén de exigir a Ecoembes una mejor dotación de contenedores de recogida selectiva, que todo residuo depositado en el contenedor correspondiente sea reciclado (algo que lamentablemente no ocurre a día de hoy) y que se cumpla la ley en materia del régimen de responsabilidad ampliada del productor para todos los envases y residuos de envases (de forma que los productores afectados asuman el coste de la gestión de estos residuos, algo que no ocurre ya que a día de hoy sufragamos en buena medida los ciudadanos con nuestros impuestos), y a la espera de que la nueva ley de residuos implante el sistema de depósito, devolución y retorno (el antiguo "casco" que había hace unos años), desde el ayuntamiento podrían ponerse en marcha las siguientes medidas para reducir el consumo de envases de un solo uso y su reciclaje: 1) incrementar el número de fuentes a lo largo del casco urbano, instalando también una fuente en todos los parques infantiles, 2) poner en marcha junto con el IES Pascual Carrión un programa de educación ambiental específico para sus alumnos/as para que tomen conciencia de este problema y sean una parte activa de la solución, 3) promover y facilitar, junto a los comerciantes, supermercados y puestos del mercado municipal el que los clientes acudan con sus propios envases reutilizables y bolsas para reducir el uso de envases de un sólo uso, 4) promover el que los establecimientos de alimentación utilicen como opción principal para guardar los productos frescos que venden (carne y pescado) el papel en lugar de los envases y bandejas de plástico como hacen a día de hoy, 5) potenciar el compostaje local y las actividades del consorcio CREA al respecto, 6) establecer normativa local que prohíba la quema de residuos agrícolas en el término municipal, promoviendo el que éstos sean triturados e incorporados al suelo in situ o, en su defecto, que puedan transportarse al Ecoparque para su correcto compostaje y 7) solicitar a Ecoembes y la Consellería de Transición Ecológica el que el sistema de depósito y retorno de envases pueda establecerse en la Comunidad Valenciana antes que lo obligue la normativa estatal (algo que me temo no veremos hasta el final de esta década) para evitar el abandono de envases en la vía pública y parajes naturales, un mal endémico que sufrimos en nuestro municipio, y aumentar la tasa de reciclaje (el sistema actual de reciclaje no funciona y no cumple con la normativa europea; véase esta noticia y los enlaces contenidos en la misma para más información sobre Ecoembes y la problemática del sistema de recogida selectiva que tenemos). 


5) Recursos hídricos y energía

La sequía que estamos viviendo en estos momentos es un recordatorio de la escasez de agua que tenemos en nuestro territorio, una escasez que se va a ver agravada por el cambio climático. Se hace pues necesario fomentar el ahorro de agua entre los vecinos/as e industrias de Sax, así como plantear la construcción de una depuradora en Sax para depurar las aguas residuales que se producen en el municipio. Este agua depurada podría luego utilizarse para el riego de las zonas verdes y el baldeo de las calles, evitando así el uso de agua potable para estos fines.

Respecto al uso de energía es fundamental también el realizar campañas de concienciación para reducir el consumo de energía entre los/as vecinos/as, empresas y comercios, así como en los edificios públicos. También es fundamental fomentar el despliegue de la energía solar en los tejados de las casas, industrias y edificios públicos. Para ello el ayuntamiento debería mantener la bonificación del IBI de las casas/edificios que instalen paneles solares más allá de los cuatro años desde la instalación que recoge la normativa municipal actual, asesorar y apoyar a vecinos e industrias sobre las ayudas existentes para instalar energía solar y aumentar la eficiencia energética de los edificios, instalar paneles solares en todos los edificios públicos y poner en marcha una cooperativa energética local que pueda suministrar energía 100% renovable a los sajeños/as. Si bien la prioridad en el despliegue de la energía solar en nuestro municipio debería de ser la de la ocupación de los tejados, también es necesario ordenar el territorio en lo que concierne a futuras plantas solares que puedan instalarse en el término municipal de Sax. Éstas deberían instalarse de forma prioritaria en solares o terrenos degradados, evitando el uso de terreno de elevado valor agrícola o paisajístico, siguiendo las mejores prácticas disponibles para minimizar su impacto ambiental (para ejemplos al respecto puede consultarse este informe). 

Otro aspecto relativo al consumo de energía es el de establecer campañas de concienciación y modificar la ordenanza municipal de tráfico para conseguir que los/as conductores/as apaguen el motor del vehículo cuando éste está parado. El no hacerlo no sólo supone un gasto de energía (y dinero) inútil, sino que contribuye a la contaminación del aire que respiramos (perjudicando así nuestra salud), incrementa el nivel de ruido que padecemos y es un comportamiento incívico que sería deseable erradicar de nuestras calles. 



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